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La historia de la primera edición de Cien años de soledad es una sucesión de acontecimientos que hicieron que la obra viera la luz en la Editorial Sudamericana. Hay un libro del hermano de Gabriel García Márquez que cuenta toda la historia.

Del libro del hermano del gran Gabo, Eligio García Márquez, reproducimos varios fragmentos en este post para contar la historia de la puesta de largo de Cien años de soledad.

El director editorial de Sudamericana, Paco Porrúa, lo contaba así “García Márquez era para mí un autor desconocido hasta que Luis Harss me habló de él en Buenos Aires. Decía que estaba al lado de Borges, Rulfo, Onetti, Cortázar, Fuentes, Vargas Llosa y otros grandes.”

Luis Harss, el periodista chileno, le regaló un ejemplar de El coronel no tiene quien le escriba. Paco Porrúa lo leyó, pero no quedó impresionado, aunque al menos sí se le despertó cierto interés.

Paco Porrúa se decidió a escribir a García Márquez a México, pidiéndole autorización parapublicar sus cuatro libros en la Editorial Sudamericana.

García Márquez describía ese contacto inicial con el señor Porrúa años más tarde “yo no lo conocía. Le contesté explicándole la situación y diciénole que, de todos modos, estaba escribiendo una novela en la que tenía puestas muchas esperanzas. Con gusto la confiaría a Sudamericana.”

Porrúa decidió entonces, motivado por los libros previos de García Márquez, y sin haber leído ni una coma de la novela en curso, enviarle la propuesta de publicación. Como prueba de la seriedad de la oferta, le añadió un contrato tipo y 500 dólares de anticipio, lo que no era una mala cantidad para la época.

La fecha exacta del anticipio fue el 17 de Octubre de 1965. ¡Gracias, mil gracias!

El contrato no hacía ninguna alusión al título del libro, ya que cuando García Márquez le respondió, no se lo había dado. Por una sencilla razón, todavía no lo tenía.

Tras recibir el contrato, Gabo le envió los dos primeros capítulos del libro. “Desde el principio de la lectura comprendí que era una cosa nueva y admirable. No había duda. Me bastó leer unas pocas líneas para advertir que estaba ante una obra maestra.”

La primera edición de Cien años de soledad comenzó a distribuirse en las librerías y los quioscos de Buenos Aires el martes 5 de junio de 1967. La editorial Sudamericana hizo na primera impresión de ocho mil ejemplares, una cifra inusual para la época.

Francisco Porrúa se había entusiasmado con el libro, y las opiniones de Cortázar y Vargas Llosa le hacían prever que la novela tendría éxito. Mucho éxito. La novela se agotó en una semana.

Nota: Esta información la hemos conseguido a través de un ejemplar de la revista El Proceso, que en su edición especial número 21 dedica un monográfico al 40 aniversario de la publicación deCien Años de Soledad. Conseguí esa revista hace dos años en un kiosco del aeropuerto deMéxico D.F.

Las posibilidades que abre darse una vuelta por el mundo.